Y, sin embargo, se mueve

Al igual que una flor siguiendo al Sol, la cúpula del Extremely Large Telescope (ELT) de ESO, podrá girar para permitir que el telescopio rastree objetos en el cielo. Visto bajo el cielo azul brillante de Cerro Armazones, en el desierto chileno de Atacama, este vídeo muestra la primera vez en que se ha puesto a prueba el giro de la cúpula.

Durante este test se movió la cúpula 10 m en cualquier dirección a 1 cm/s, pero la velocidad de funcionamiento final será de 5 km/h. La prueba fue realizada por ingenieros de Cimolai, la empresa contratada por ESO para diseñar y construir la cúpula del ELT y la estructura del telescopio. Gracias a la presencia de las personas que trabajan arduamente en este vídeo acelerado podemos apreciar, a escala, el tamaño de la cúpula del telescopio.

Rotar la cúpula no es poca cosa, ya que su esqueleto pesa actualmente unas 2500 toneladas, y cuando esté terminada pesará alrededor de 6100 toneladas. Esta primera prueba se llevó a cabo "manualmente" con dispositivos hidráulicos especiales, pero su funcionamiento, una vez acabado, se hará a través de vagones motorizados. Si bien el movimiento de la cúpula está diseñado para ser suave (y así se confirmó durante esta prueba), la cúpula se mantiene separada del resto de la estructura para limitar las vibraciones que podrían transmitirse al telescopio en sí.

La cúpula, en su forma final, tendrá un revestimiento de aluminio aislante para proteger el telescopio de los elementos y puertas correderas para abrirlo a las estrellas. La construcción de esta maravilla de la ingeniería en medio del desierto presenta desafíos únicos y, sin embargo, logros recientes como la rotación de la cúpula y los primeros segmentos de espejo almacenados en Paranal muestran que el ELT está cada vez más cerca de convertirse en realidad.